Me cansé de sentirme la persona menos importante en su vida, de no verlo, de esperar un espacio, de buscar el momento, de dedicarme, de quererlo de esta manera, de ver como ignora los sentimientos, sin darle valor.
Es sábado por la noche, ya perdí la cuenta de las veces que miré la hora y sigo aquí, esperando. Un suspiro asoma, no sé es resignación, indignación, desilusión o cansancio.
Mirando el vacio susurro…
-¡No viene! ¿Por qué no me sorprende?
Debí tomar una decisión hace mucho tiempo atrás. Ésta no es la primera vez, no recuerdo cuántos sábados son iguales, ausencia – soledad – silencio, que a veces ya ni duele.
No es justo no saber porqué lo hace, y cuando después aparece, su indiferencia y silencio pueden llegar a lastimar hasta mi último rincón
- ¡Se acabó! Le dije al silencio, enfrentándome a él y a mí también, supongo.
Me repito otra vez ¡Ya no vendrá, iré a descansar!
Pero a quién engaño, si no es a mí misma, ya no puedo contener más las lágrimas, la rabia contenida, lo cansada y agotada que me siento de este repetitivo cuento.
No sé realmente a partir de qué nos ocurre esto, no es el hombre de quién me enamoré, no es el hombre que me enamoró, no imagina lo frustrante que es ver como poco a poco la ilusión se me escapa como arena de las manos.
Cómo duele perder a quién amé con todo mí ser, esto debe acabar y regreso al punto de partida… Me cansé…
Ya no quedan más energías para acercarme a el, ya no hay fuerzas para que la comunicación se dé sólo por este medio, ya no hay voluntad para seguir siendo yo la que intenta acercarse, ya no hay esperanzas para salvar lo que queda, sólo me queda la duda si realmente algo de esto, fue mío, si el lo fue.
Ya no quiero disfrazar mi rostro con hipócritas sonrisas para demostrar que estoy bien, porque no lo estoy. Ya no más!
No doy la espalda porque no lo ame, no lo hago buscando que se aleje, no tengo otro camino, no me dejó salida, por lo menos un atajo.
Sé que le di todo, me voy y no sé si le importé alguna vez, si me amo, si tendrá algún remordimiento o si es que simplemente se dará cuenta que por mi había algún sentimiento.
Lo siento por el! Porque de verdad lo queria, porque si debía ofrecer mi vida por la de el , yo lo hacía sin miramientos ni reparos aunque suene cursi
Me cansé de ser la que hace el mejor esfuerzo para recibir unas cuantas migajas de palabras tiernas o de piedad a cambio.
Sencillamente, me cansé de ser la persona menos importante en su vida.
en una vida que es simple y llanamente perversa porque tal vez nunca ha aprendido a amar.
en una vida que es simple y llanamente perversa porque tal vez nunca ha aprendido a amar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario